Entradas

Mostrando entradas de 2017

No quiero

Sólo quedan unos meses para que termine mi vida univeristaria, han sido 4 años maravillosos que han cambiado mi vida a mejor.  Nunca hubiese imaginado que conocería a gente tan increible en una sola ciudad. He sufrido, reido y amado tanto que el simple hecho de pensar que esto se termina me hace sentir un nudo en la garganta. Si pudiese, volvería a vivir esta experiencia una y otra vez , no quiero irme. Me sentí querida desdel primer día, de hecho , he hecho amistades que espero que duren toda la vida y que nos reunamos todos juntos al menos una vez al año.  Vivir sola, tener que adaptarme a un nuevo entorno sin conocer a nadie, ser responsable de mi misma; todas han sido experiencias entriquecedoras para mi. Antes de venir aquí tenía miedo de lo que podía pasar, ahora se que no tenía nada que temer, porque he tenido los mejores compañeros y maestros que una podría desear. Los años me han pasado volando, esta experiencia me ha sabido a poco, quiero más. Pero solo

El gato negro

Todos conocemos la famosa leyenda del gato negro, que al cruzarse en nuestro camino trunca nuestro destino. Pero esta historia se ha distorsionado a lo largo del tiempo, como las palabras que fluyen en un teléfono loco, variando, cambiando y eliminando el concepto. Hoy me dispongo a contaros su verdad, hoy toca tintar la red con con otra historia, otra Monogatari. Los gatos, aunque el mundo lo niegue, son seres fieles, que se marchan a vivir su libertad por las calles, regresando siempre a su hogar al finalizar su tiempo de ocio. Pero no todos ellos retornan, porque, aunque divertida, la libertad también conlleva riesgos que pueden terminar hasta con el más listo de la camada. Y esto, amigos, es lo que le ocurrió al gato negro. Los accidentes suceden y hay lugares de los que no se puede marchar. En su caso, incluso después de dejar este mundo, continuó vagando eternamente para encontrar su hogar, sin hacerlo jamás. La tristeza que esto le provoca maldice a aquellos desdichados q

Evolución personal

¿Sabéis una cosa? Cuando me imagino a una persona a la que yo odiaría con todas mis fuerzas, me imagino a mi misma, no a la yo de ahora, sino a la yo de 12 años. Aquella yo era una persona egocéntrica, que no dudaba en mirar a los otros como algo inferior. No lo decía pero... lo pensaba, lo pensaba mucho. Por aquel entonces adelgace unos 20 kg, lo cual me dio una autoestima que no había tenido en mis 12 años de vida. A su vez, esto hizo que mis sentido de superioridad aumentase, era una diva, una diva que por razones que desconozco todo el mundo amaba. Mi popularidad creció como la espuma y con ella mi ego. Pasé de ser la chica marginada dulce, gordita e inocente a la chica que despreciaba todo a su alrededor, pero eso si, en silencio. Miraba a todas aquellas chicas que tenían más de una 38 con desprecio, para mi eran asquerosas y me daba asco ver fotos mías anteriores. Me preguntaba a mi misma como no me había matado por estar así de gorda. Y bueno, por ese tipo de pensamientos

Amistad

La amistad es algo que me parece realmente importante, a la par que mi familia y más que una pareja. Atesoro y adoro a mis mejores amigos, son personas a las que admiro o que quiero cuidar con todas mis fuerzas. quiero estar allí para ellos como lo están ellos para mi. Siempre me han cuidado de una manera muy especial; diciéndome las consecuencias que podrían tener mis actos ( acertando de unas manera que incluso me asusta), abrazándome en los momentos adecuados; aceptando mis llamadas hasta las 5 de la mañana cuando estaba absolutamente destrozada a pesar de que nos levantábamos a las 6 para coger el tren; visitándome,sin importar las consecuencias, cada vez que se destrozaba mi coraza; dándome una capón cada vez digo que es absolutamente imposible que la persona que amo me ame a mi, animándome a declararme a pesar de saber que la respuesta es negativa;diciéndome lo que piensan sin pelos en la lengua,;escuchando todas mi batallitas irrelevantes; entendiendo sentimientos de los cuale

Miedo

Hay algo que siempre he escondido, hay algo que nunca he querido que nadie descubriera, pero creo que ya va siendo hora de soltarlo. Ya es hora de decir cuan cobarde soy. Es cierto que nunca he tenido problemas en decir lo que pienso o lo que siento hacia personas que no me importan. Nunca he tenido reparos a la hora de decirle a alguien que no me cae bien o en aceptar críticas de estos. Pero esta "valentía"desaparece pronto en el momento en que se trata de personas que me importan. Cuando noto que algo pasa, que es persona esta actuando extraño conmigo...no soy capaz de articular palabra. Muy pocas veces he sido capaz de preguntar "¿Te pasa algo conmigo?", por puro miedo a la respuesta que pueda darme. Me da pavor pensar en la probabilidad de que esta persona me odie por uno u otro motivo, me aterra no ser querida por las personas que quiero. Por culpa de eso he perdido ya muchos contactos,por no preguntar , por miedo, provocando que me distancie poco a poc

Monogatari, el contador de historias

Esta es la historia de alguien que cuenta historias. Su lema es "Cuenta todo lo que puede ser contado por alguien más" , es decir, cuenta todo o que ha sucedido a su alrededor a terceras personas, personas sin conexión entre si, de tal forma que pueden dar un punto de vista más objetivo sobre lo que el sujeto en si vive y así poder adaptarse de la mejor manera a su entorno. Pero esto implica una cosa, la posibilidad de que en un punto dado, estos sujetos interctuen entre sí y acabe todo en un enorme problema (porque hay gente a la que le molesta que hablen de ellos o que alguien desconocido sepa algo de ellos) . Esto es algo que al contador de historias, es decir, yo misma, no para de preocuparle, sobretodo ahora que esta conectando a todos los sujetos de su alrededor, por gracia o desgracia va siendo hora de adoptar una nueva estrategia de adaptación. Al contador de historias no le gusta tener secretos, al menos los que ya han sido compartidos con otras personas, es deci

Se acabaron los dramas

Después de reflexionar y reflexionar durante meses por fin tengo algo en claro, tengo que permanecer sola, al menos durante un tiempo. Quiero dejar el amor a un lado, solo me trae problemas y esa es la verdad, nunca voy a ser correspondida por esa persona de la que ya os he hablado más de una vez y al ser consciente de ello he decidido dejarlo estar. Sigo sin haberle dicho nada ni creo que lo haga nunca, las cosas están bien como están ahora, tranquilas y relajadas. Puede que esté diciendo esto porque soy una cobarde que no quiere arriesgarse a que le vuelvan a romper este corazón herido, algo así solo conseguiría hundirme ahora que estoy volviendo a flote. No me hace falta una pareja para ser feliz, ni ahora ni nunca, y quiero disfrutar de mi vida de soltera tanto como pueda, esto no significa que vaya a liarme con el primer chico que pase ni mucho menos(lo puntualizo porque se lo comenté a alguien y me vino con esas), solo quiero disfrutar de mis amigos, de mi familia y atesorarl